La vida como una novela

La vida como una novela

12-11-2015

Annie Ernaux (Lillebonne,1940) sabe que la vida es el material literario más valioso. Por eso, en sus novelas no encontraremos ficción alguna ni personajes detrás de los que esconderse: su escritura autoficcional está desprovista de todo pudor. Su necesidad de volcarse en la escritura de lo íntimo ha dado como resultado más de veinte títulos que la han llevado a estar considerada como una de las autoras contemporaneas más importantes en lengua francesa.

Sus padres, comerciantes de origen campesino, querían que su hija tuviera una vida mejor. Estaban seguros de que llegaría lejos. De que sería alguien, de que sabría «armarse bien para la vida». Por eso, decidieron que fuera alumna del prestigioso pensionado donde iban las las hijas de las familias de clase alta, mientras a su alrededor, en su familia y en su barrio, los niños asistían al colegio público. Esa separación de los suyos y el contacto temprano con la diferencia de clases, marcó a la autora hasta el punto de convertirse en un tema recurrente en su obra.

Ernaux define sus libros como «algo entre la literatura, la sociología y la historia». Utiliza un tono despegado, distante, como si la vida que observa y que cuenta no fuera la suya. De forma precisa y aséptica, en primera persona, la autora narra en sus obras fragmentos de su vida: en El acontecimiento, cuenta su embarazo adolescente y su aborto; en La vergüenza, el punto de partida es una tarde de domingo en que su padre está a punto de matar a su madre; en La ocupación, cuenta un episodio de celos enfermizos que vivió cuando su ex pareja comenzó otra relación. En El lugar (Premio Renaudot) entrelaza su vida con la de su padre.

De la mano de Cabaret Voltaire llega a las librerías La mujer helada (traducción de Lydia Vázquez Jiménez; 230 páginas). En ella, cuenta como su matrimonio la llevo a vivir en primera persona el conflicto entre mujeres reales y mujeres «ideales», otra de las constantes de sus libros: todos ellos contienen una poderosa defensa de la mujer que decide su propia vida. Ernaux narra en La mujer helada como creció entre mujeres trabajadoras y valientes, alejadas del canon de «mujer ideal» de la época. Eran los años 50 y las mujeres debían ser esposas entregadas a sus maridos y a sus hijos que cuidaban primorosamente de su hogar. Casarse y tener un hijo la alejó de su vida profesional para convertirla en el ama de casa dependiente de su marido que la helaría por dentro. Una experiencia vital más que Ernaux añade a esa crónica de su vida que abre a los lectores en sus libros.

Este artículo apareció publicado el jueves 12 de noviembre de 2015 en «Artes & Letras», suplemento cultural de Heraldo de Aragón. Aquí podéis descargar el artículo en PDF.

¿Quieres estar informado sobre los autores que visitarán la librería próximamente? Echa un vistazo a nuestra agenda para saber los libros que presentaremos.

Compartir artículo